CINCUENTA AÑOS SIN  ERNEST HEMINGWAY

Por Santiago Villarreal Cuéllar

Conocido mundialmente por su novela "El Viejo y el Mar," Ernest  Miller Hemingway comenzó su carrera literaria en Paris en el año de 1922, ciudad donde se radicó viviendo una vida bastante austera debido a sus dificultades económicas, aunque en las cartas que enviaba a su familia les decía que residía en el más exclusivo sector del Barrio Latino. Antes hizo parte de la primera guerra mundial, aspecto que lo marcó psicológicamente para el resto de su vida. Sin duda su vida de periodista, como corresponsal de guerra y posteriormente escribiendo para varios periódicos, influyó notoriamente en su posterior exitosa carrera literaria. Al llegar a Paris se vinculó a las tertulias literarias de la llamada "Generación Perdida," entre quienes se destacaron Gertrude Stein, Ezra Pound y F. Scott Fitzgerald, los que le estimularon a publicar sus relatos.

Nacido el 21 de julio de 1899 en Oak Park (Illinois), fue el segundo hijo de una familia de seis. Su padre, quien era médico, le enseñó a muy temprana edad el arte de la pesca y a los tres años Ernest ya manejaba con mucha destreza una caña de pescar. A los doce manejaba una carabina con la que cazaba, otra afición que su padre le enseñó, la cual lo acompañaría toda su vida pues en la casa de su Finca Vigía, en Cuba,  lugar donde vivió casi veinte años, poseía una gran colección de cuerpos y cabezas de animales cuidadosamente disecados, producto de sus años de caza.

Su primer gran estimulo a su trabajo literario lo alcanzó en el año de 1953, cuando recibió el Premio Pulitzer por la publicación de un breve relato en la revista Life, titulado "El Viejo y el Mar." En 1954 recibiría el máximo galardón que cualquier escritor pueda obtener en su vida, como lo fue el Premio Nobel de literatura. Premio que Hemingway se lo dedicó a Cuba, país al que consideraba como su segunda patria. Fue un excelente amigo del líder cubano Fidel Castro, con quien compartió muchos momentos de discusión sobre asuntos literarios.

Su lamentable muerte ocurrió el dos de julio de 1961, cuando apareció muerto de un disparo de escopeta, asunto sobre el que todavía se especula, de si se trató de un suicidio, o por el contrario fue un absurdo accidente. Lo cierto es que debido a la recién descubierta enfermedad de Alzheimer, algunas semanas antes, lo sumió en una profunda depresión, lo que sumado a su facilidad y familiaridad en el manejo de las armas de fuego, hacen presumir que efectivamente optó por suicidarse.

Entre sus novelas más conocidas encontramos, Fiesta, Adiós a las armas, Verdes colinas de África, Tener y no tener, Por quién doblan las campanas. Entre sus relatos están, Tres relatos y diez poemas, En nuestro tiempo, Hombres sin mujeres, El ganador no se lleva nada. Hemingway dejó muchas obras póstumas entre las que se destacan, Paris era una fiesta, Enviado especial, Islas en el golfo, Un verano peligroso, El jardín del Edén. Pero además escribió muchos cuentos que han sido publicados en diferentes revistas literarias y antologías de los mejores cuentos de diferentes escritores.

Son cincuenta años desde que su vida se extinguió, pero sus novelas y relatos permanecen vivos en la memoria de las mentes de quienes leemos y releemos sus obras en las que encontramos cada día nuevos detalles sobre su maestría literaria.  

 

SANTIAGO VILLARREAL CUELLAR
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